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Temporada para lucir los abrigos y las gabardinas

 

Vale la pena revivir esas prendas que muchas veces dejamos guardadas para los viajes o paseos. La tradicional gabardina de Burberry, un clásico con más de 100 años.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Definitivamente, el frío y la lluvia, o mejor, los aguaceros, no son fenómenos naturales pasajeros por estos días. Y así amanezca un poco despejado, no hay que fiarse, sin duda caerá agua del cielo con toda su furia.

 

Por eso vale la pena revivir en el ropero esas gabardinas y abrigos, que muchas veces dejamos guardados para los viajes o paseos donde se sabe que el clima siempre es gris o se está en temporada de invierno.

Además, vale recordar un poco la historia de la gabardina, que aunque tiene más de cien años, el estilo trench coat que la popularizó, cumple cien de la mano de la Primera Guerra Mundial.

 

El tejido impermeable que protege del agua fue un invento de Thomas Burberry en 1879 pensando en la ropa de los granjeros y su trabajo al aire libre. Así comenzó la gabardina.

Pero el diseño que realizó la marca para los oficiales del ejército británico durante la guerra del principios del siglo pasado fue el que se popularizó, se convirtió en un clásico y sigue vigente y presente en el ropero de cualquier mortal.

 

El trench coat (abrigo de trinchera) ha servido también de inspiración para muchas marcas –de lujo, masivas, de diseñador– para diseñar sus abrigos y chaquetas. Puede ir más largo o más corto, con más o menos botones, con lazo o sin él. 

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